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Tierra de mujeres: Ana di Pangracio

¿Cuál es su nombre completo?

Ana Di Pangracio

¿Cuándo y dónde nació?

20 de junio de 1980 en Buenos Aires, Argentina

¿A qué se dedica y desde cuándo?

Trabajo en temas socioambientales desde 2007, poco después de haberme graduado. Tras haber trabajado de manera rentada y no rentada en otras organizaciones de sociedad civil, desde agosto de 2010 me desempeño en la Fundación Ambiente y Recursos Naturales (FARN). 

¿Qué situación recuerda que haya generado en usted el interés por la acción ambiental?

Desde adolescente tenía interés por las aves, su observación y aprender sobre ellas. Eso influyó en mi decisión de estudios también. Cuando decidí estudiar Derecho y formarme en derecho público, constitucional e internacional, para luego tener una especialización en derecho ambiental.

Y en el último año de estudios como requisito de hacer prácticas, participé en una clínica jurídica especializada en temas ambientales. Esto lo decidí por mi interés de la protección de los bienes públicos. Con esta experiencia además de tener más formación teórica pude dar un servicio gratuito a personas que no pueden costear un pago y se enfrentan a algún problema socioambiental.

¿Cuáles son sus estudios?

Soy abogada graduada de la Facultad de Derecho de la Universidad de Buenos Aires (UBA), especializada en derecho ambiental (Universidad Católica Argentina). Posgrado en Género y Derecho (Facultad de Derecho UBA). Alumni del International Visitor Leadership Program (IVLP) del Departamento de Estado de EEUU. Becaria de intercambio del Programa Sueco «Linnaeus-Palme». También he hecho capacitaciones sobre tecnología, monitoreo, evaluación e impacto y gestión de proyectos.

¿A qué se ha dedicado?

Actualmente en FARN soy Directora de Biodiversidad y Directora Ejecutiva Adjunta. Gestiono proyectos sobre ordenamiento territorial participativo, humedales, bosques nativos, áreas protegidas y conservadas, restauración ecológica y corredores bioculturales, derechos de acceso y personas defensoras del ambiente, enfoques basados en los derechos humanos a la conservación, y sigo las negociaciones de las Convenciones sobre la Diversidad Biológica y de Lucha contra la Desertificación.

FARN me permite canalizar mi interés por los temas socioambientales a través de la generación de conocimientos y trabajo en territorio junto a diversidad de comunidades urbanas y rurales.

Soy miembro del Grupo de Mujeres del CDB y participo en la Alianza del CDB. Soy integrante electa del Panel de OSC de la CNULD para América Latina y el Caribe (2022-2024) y Consejera electa de la UICN (2021-2025). Soy miembro de la WCEL, CEESP y WCPA de la UICN.

Fui Vicepresidenta del Foro para la Conservación del Mar Patagónico (2016-2019)., Coordinadora del Comité Nacional Argentino de UICN (2015-2021) y Presidenta del Comité Regional Sudamericano de UICN (2017-2019). He sido docente en diversas universidades públicas y privadas.

¿Cuáles han sido algunos de los desafíos que ha tenido que enfrentar? ¿Cómo los ha sorteado?

Varios obstáculos he enfrentado. Uno es que aunque tenía un interés por los temas ambientales el programa en la Universidad no me ofrecía la oportunidad de adquirir estos conocimientos como parte de la curricula. Solo había alguna materia sobre recursos naturales con fines productivistas, no de protección ambiental. En este contexto tuve que buscar mi propio camino. Mientras estudiaba la carrera de grado, voluntariaba en organizaciones ambientales para obtener experiencia práctica. Después estudié algunos otros cursos de posgrado en temas ambientales y también, gracias a una beca fui a estudiar al exterior. De esta manera fui sorteando las limitantes en la formación para el derecho y política ambiental.

Este sector tiene muchas áreas de oportunidad para integrar a las mujeres en diferentes líneas de acción. A veces puede ser muy frustrante para nosotras pues es un espacio bastante masculinizado. Pero de apoco se va dando mayor visibilidad a las mujeres y van ganando lugar, pero hay mucho trabajo por hacer.

¿Qué mensaje daría a las mujeres y niñas del mundo?

Armarse de mucha paciencia y ser persistentes. A veces las cosas pueden complicarse, y debemos sortear algunos obstáculos, en particular aquellas mujeres que buscan trabajar en temas de conservación.  Por ello les aliento a trabajar en red y tejer y construir junto con otras mujeres que están en el sector para hacerse escuchar y lograr cambios.